Francia, rodeada por los Alpes, el Mediterráneo, el Atlántico y los Pirineos, guarda algunos de los rincones más bonitos y perdidos de Europa. ¿Quién no conoce la Torre Eiffel, los Campos Elíseos o Disneyland? La más que conocida París acapara la mayor parte de los focos nacionales, y con razón, ya que entre sus calles puedes perderte y cada esquina desprende más belleza que la anterior.
Nosotros, en cambio, te traemos cinco rincones franceses en los que podrás perderte y quedar asombrado. No son los principales destinos turísticos del país y eso es, en cambio, lo que hace que sean más atractivos para nosotros. Apenas turistas, tranquilidad, armonía o naturaleza son algunas de las ventajas que tienen los siguientes destinos.
Garganta de Verdon
Ubicada en el sur-este del país galo, en la zona de los Alpes de Alta Provenza, se encuentra este profundo cañón del río Verdon (llamado así por el color turquesa de sus aguas) con una altura de hasta 700 metros. Este paisaje espectacular es propicio para la práctica de actividades como senderismo, la escalada, el piragüismo o el kayak.
Este maravilloso paraje se halla a 150 kilómetros de Marsella y a 125 kilómetros de Niza, por si quieres completar tu viaje por Francia con dos grandes ciudades de tradición mediterránea.
Eguisheim
Este pequeño pueblo situado en la zona del Alto Rin, en la frontera con Alemania, es conocido por pertenecer a la ruta de los vinos y la región de Alsacia, eterno territorio de conflicto entre ambos países.
Aquí encontrarás un paraje medieval que te hará pensar que estás en la Edad Media gracias a sus casas entramadas y sus famosos adoquines. La mayor peculiaridad de Eguisheim es que sus calles, que rodean el Castillo, están dispuestas en forma de círculos concéntricos. La adornación de sus viviendas también es digna de admirar. Si buscas dónde comer en Eguisheim, te encontrarás con una de las cocinas de más calidad de Francia gracias a sus vinos y su excelente foie gras.
Calanque D’en-Vau
A 10 kilómetros de Marsella se sitúa esta pequeña cala rodeada de numerosos acantilados que chocan con el agua y la convierte en un color azul esmeralda. Este color, unido a la inmensa calma de la zona, te permite disfrutar de uno de los baños más tranquilos de todo el Mediterráneo.
Su localización hace que te preguntes cómo llegar a Calanque D’en Vau, ya que solo es posible en barco a travesando un sendero entre las montañas.
Si te gusta hacer senderismo y buscas un terreno propicio, seguro y apacible, Calanque D’en Vau te ofrece todo lo que buscas. Además, si el buceo es una de tus aficiones, la claridad de sus aguas facilita la inmersión.
Colmar
También situado en la provincia de Alsacia y a apenas 20 kilómetros del Rin, que marca la frontera con Alemania. Colmar es conocida por tener entre sus calles una pequeña Venecia, gracias a diversos canales y puentes que recorren el pueblo recordando a la magnífica ciudad italiana. Además, de aquí es Augusto Bartholdi, el creador de la Estatua de la Libertad. De hecho, podrás encontrar una réplica entre las calles de este pequeño pueblo francés.
Si te preguntas cómo llegar a Colmar, a 70 kilómetros se encuentra Estrasburgo, sede del Parlamento Europeo, que tiene frecuencia diaria y económica con este pueblo.
Peillon
Mónaco, de sobra conocido por todo el mundo, es uno de los destinos turísticos más lujosos y llamativos del Mediterráneo. A 10 kilómetros hacia el interior, entre montañas, se sitúa el pueblo de Peillon, cuya principal característica es que está situado en lo alto de una colina.
Sus calles estrechas, empinadas y llenas de arcos hacen del paraje algo digno de mención. Además de su belleza, si buscas qué ver en Peillon, tendrás la oportunidad de disfrutar de numerosos senderos para pasear, hacer escalada o actividades relacionadas con la naturaleza.
Estos cinco rincones, aunque Francia guarda muchos más, próximamente serán destinos turísticos muy concurridos. Además, son cómodos y accesibles para poder llevar tu equipaje ya sea en maletas o mochilas y acceder al lugar más escondido para disfrutar de unas vistas maravillosas.