La mayoría de las personas prefieren viajar en verano. El calor, la playa y las largas horas de sol son algunos de los motivos que llevan a la gente a preferir la estación estival para hacer escapadas. Sin embargo, no pierdas de vista el invierno para viajar. Las ciudades respiran un aire mágico durante los meses de invierno, sobre todo en las fechas próximas a Navidad. Además, la nieve da un ambiente espectacular e incluso acogedor a algunas ciudades.
Ahora se acerca el puente de diciembre y dentro de poco tendremos las fiestas de Navidad. Son fechas perfectas para viajar. Que no te asusten el frío y la nieve, aprovecha para conocer otra cara de las ciudades y prepara tu maleta Greenwich. Hoy os vamos a proponer unos cuantos destinos ideales para ir en invierno.
Visitar París en invierno
El invierno en París es muy frío, pero se compensa por el encanto que tiene la ciudad en esta época del año. La nieve no es perpetua en la ciudad del amor, aunque si tu visita coincide con una buena nevada, tendrás la suerte de ver un paisaje maravilloso.
Es cierto que las horas de sol son pocas y parece que los días no se pueden aprovechar tanto. Sin embargo, la noche parisina es asombrosa: ¡seguro que la sabes aprovechar! Tienes que pasear de noche por las calles de París para descubrir la iluminación de sus monumentos.
Además, ya están instaladas las luces de Navidad, por lo que caminar por sus avenidas es una delicia a pesar del frío. No te pierdas la iluminación de Galerías Lafayette. También puedes aprovechar para tomar un café caliente en una de sus innumerables cafeterías. Son muy acogedoras y están por toda la ciudad.
Estocolmo y su nieve
Los países escandinavos son perfectos para impregnarse del ambiente invernal. Nosotros proponemos Estocolmo, capital de Suecia, como uno de los mejores destinos europeos para disfrutar del invierno. Eso sí, te avisamos de que hace mucho, mucho frío.
La nieve es perpetua entre noviembre y marzo, por lo que sus calles están perfectamente adaptadas a estas condiciones. Además, el velo blanco que cubre la ciudad crea un escenario que parece sacado de un cuento.
Como pasa en otras ciudades, en Navidad el ambiente es todavía más mágico. Os recomendamos que visitéis Stortorget y Skansen, donde ponen unos mercadillos navideños preciosos. Cuando no aguantéis más el frío, siempre podéis entrar a una de sus galerías de arte o museos: hay muchísimos y disfrutaras de la vanguardia sueca.
Las termas de Budapest
La nieve ya ha llegado a la capital de Hungría. En invierno es habitual que el termómetro no pase de los cero grados en Budapest. Pero el frío no es excusa para visitar esta ciudad que se caracteriza por su enorme Parlamento, sus largas avenidas y el majestuoso río Danubio.
Una de las visitas obligatorias son sus termas, en especial los baños Széchenyi: un espectacular balneario construido a principios del siglo XX. Sus aguas calientes provienen de dos fuentes de aguas termales, por lo que es un lujo bañarse en agua caliente mientras la nieve cae alrededor.
Si tienes la suerte de ir cuando nieva, no puedes perderte Margarit-sziget, una isla en medio del Danubio que, además, es el parque más grande de Budapest. Mide dos kilómetros y medio de largo y es espectacular visitarla con sus árboles y césped cubiertos de nieve.
